Luis Pardo es CEO de Sage para España y Portugal. Licenciado summa cum laude en Dirección y Administración de Empresas por la European University, Luis Pardo completa sus estudios académicos con diversos MBAs y postgrados en IESE, EADA, ESADE e ISDI.
Con una amplia trayectoria directiva en multinacionales, en 2001 se incorporó a Sage, líder mundial en software de gestión para empresas, ocupando diversos cargos de alta dirección en España y Europa. En 2014 fue nombrado CEO para España y Portugal.
Su contribución al crecimiento del tejido empresarial ha sido reconocida con diversos galardones como el premio al CEO del año 2017 del diario La Razón, la Medalla de Oro al Mérito por el trabajo de la Asociación Europea de Economía y Competitividad en 2018 y CEO del año en la categoría de gran empresa por el Club CEO en 2020.
Pardo es miembro del Consejo de Acción Empresarial de CEOE, del Consejo asesor de FOMENT, miembro del Comité Directivo de la patronal de las tecnologías AMETIC y patrono de la Fundación EADA entre otras organizaciones empresariales. Pardo es asimismo miembro del Governing Council de la Cámara de Comercio Británica y presidente de la institución desde mayo de 2020.
Considerado uno de los TOP 10 influencers de empresa y tecnología en España, ha escrito centenares de artículos y varios libros entre los que destaca ‘El ABC del Autónomo’ (Editorial Deusto) y ‘Viaje al centro del humanismo digital’ (Editorial Verssus).
El confinamiento nos ha obligado a adaptarnos al formato tele-presencial en el entorno laboral y en casi todos los ámbitos de nuestra vida social. ¿Cuáles crees que son los cambios que han venido para quedarse?
Evidentemente, uno de ellos es el teletrabajo, que consideramos ha llegado para quedarse. En mayor o menor medida, todo el tejido empresarial español se ha adaptado al trabajo en remoto y cuenta con planes y políticas para su mantenimiento en el tiempo. El teletrabajo en España es actualmente voluntario, tanto el trabajador como el empresario pueden aceptarlo o rechazarlo, pero si el 90%* de las personas que trabajan en remoto planean seguir haciéndolo durante el resto de sus vidas… ¡por algo será!
No obstante, el teletrabajo puede no ser adecuado para algunas empresas o puestos, generando a los trabajadores estrés adicional y problemas de salud mental, sensación de soledad y pérdida de identidad o reducir la productividad de la empresa, entre otras consecuencias nefastas. En este sentido, yo apuesto por el trabajo en remoto, pero llevado a cabo de forma responsable para disfrutar de sus ventajas a la vez que se bloquean los peligros de entenderlo de forma incorrecta.
En mi opinión, debemos abrazar el cambio y el progreso, pero siempre formándonos para entenderlo y siendo responsables y resilientes en cada una de las nuevas realidades que todavía nos tocará vivir.
En Sage apostamos por el cambio y por ello estábamos totalmente preparados para teletrabajar, tecnológica y culturalmente. Unos días antes de decretar el estado de alarma ya estábamos en casa el 100% de la plantilla, sin que en ningún momento se haya resentido nuestra estrecha relación y compromiso de servicio con nuestros clientes y partners.
* Encuesta Global del Espacio de Trabajo realizada por GO-Gulf.
Está claro que tras la crisis del COVID-19 el entorno económico será incierto, ¿cómo cree que afectará esto a las empresas y que características cree que va a tener el nuevo escenario?
El principal reto que tiene España es reactivar su economía y sin duda una de las mejores palancas para ello es la digitalización. En este sentido, Sage participa junto al Gobierno en el Plan Acelera, un programa que tiene como objetivo acelerar el proceso de digitalización en las Pymes. También colaboramos con la principal patronal del sector tecnológico, Ametic, donde se han elaborado proyectos macro tractores capaces de recuperar la economía en varios sectores claves de España a través de tecnología e innovación.
Las pequeñas y medianas empresas son conscientes de que la transformación digital es esencial para su futuro. De hecho, un 68 % de las Pymes lo considera una prioridad alta según una encuesta reciente que hemos realizado. El problema es que muchas siguen reticentes a invertir en su aceleración digital, por lo que empresas como la nuestra tienen cada vez un papel más relevante de cara a ayudarlas y asesorarlas primero en un cambio cultural y luego en facilitarles las herramientas, productos y servicios más innovadores del mercado en función de sus necesidades.
Parece que nos estamos adaptando a una nueva normalidad con cambios en todos los sectores, ¿cuáles están siendo los principales retos en su sector y cuales prevé que vendrán tras la crisis del COVID-19?
El sector tecnológico tiene la enorme fortuna de haberse vuelto indispensable durante esta crisis, por lo que nuestro principal reto a partir de ahora es adaptarnos en tantos ámbitos como sea necesario para seguir siendo capaces de dar respuesta a las necesidades de los empresarios. Durante esta crisis han pasado muchas cosas, en el ámbito humano, económico y regulatorio, así que necesitamos generar más innovación, así como novedosas formas de interacción con nuestros clientes que respondan al nuevo contexto económico, laboral y social.
Como desde Sage hemos entendido que la situación genera mucha incertidumbre entre los empresarios, hemos querido allanarles el terreno ofreciendo masivas cantidades de formación gratuita a nuestros clientes a través de un plan de ayudas por valor de un millón de euros destinado a la formación online que les ha permitido adaptarse a las nuevas necesidades del ecosistema empresarial.
The Valley apuesta por el por el conocimiento como materia prima para aprovechar la oportunidad de la economía digital, ¿qué importancia tiene en tu organización la capacitación del talento de tus equipos?, y ¿cuáles considera que serán las capacidades más relevantes de los profesionales en el nuevo entorno?
En Sage las personas son el epicentro de todas las estrategias de negocio porque estamos seguros de que su bienestar repercute notablemente en la cuenta de resultados. Por eso, durante la crisis hemos habilitado distintas iniciativas de apoyo para dotar a todos los empleados de herramientas que les permitiesen afrontar la situación de la mejor forma posible, como apoyo psicológico, equipos y ergonomía o formación on-line entre otras actividades.
Esta necesidad de actualización constante a la que nos sometemos, en especial las empresas tecnológicas, no nos puede llevar a olvidar que también contamos un talento sénior que atesora un conocimiento muy valioso. Para ello organizamos periódicamente encuentros entre todo el personal en los que muchos de ellos nos explican y enseñan todo lo que han aprendido este tiempo. Un best practice interno muy valorado por todos.
En este sentido también trabajamos para ayudar no solo a los trabajadores que ya están en el sector, sino a los que aún están por llegar, porque las capacitaciones en carreras STEM es el futuro de la sociedad digital. De hecho, según un estudio reciente de Barcelona Digital Talent, en los últimos dos años en la ciudad catalana se ha incrementado en un 80% la demanda de perfiles digitales, mientras que la oferta de profesionales digitales disponibles sólo ha crecido un 23%. Nuestro objetivo es reducir al máximo posible esa brecha. Por ello, desde Sage Foundation tenemos el programa FutureMakers, que ofrece experiencias prácticas a jóvenes de entre 13 y 17 años para crear soluciones que combinan el elemento humano con la inteligencia artificial
Las empresas comienzan a dar pasos hacia la transformación digital que se asienta ahora como ventaja competitiva en esa nueva normalidad. ¿Sobre qué claves para la transformación digital deben las empresas priorizar en este momento para extraer más valor?
Las empresas que mejor han sabido adaptarse al teletrabajo han sido aquellas que disponían de sus servicios y archivos en la nube, porque no han tenido que hacer la migración de manera abrupta. Sin embargo, el 80,5% de las Pymes no han aumentado el uso de la nube para la gestión de su empresa durante el confinamiento, por lo que en este sentido aún queda mucho trabajo por hacer, más si tenemos en cuenta que suponen el 99,8 % del tejido empresarial en España.
No obstante, desde el sector tecnológico no podemos olvidar que el ser humano debe estar en el centro de las reflexiones para aportar los componentes éticos, por lo que debemos pensar en cómo utilizar la tecnología para mejorar las interacciones laborales. En este sentido, desde Sage en estos meses hemos adaptado nuestro chatbot de contabilidad y gestión Pegg a la nueva realidad y ahora funciona como un asistente virtual para que los empleados estén informados de todo lo que acontece en torno a la Covid-19
¿Qué consejos darías ahora mismo a cualquier profesional de cara a afrontar con éxito la fase post-confinamiento?
En esta etapa es clave la priorización de las acciones que logren más valor. Además, hay que tener la determinación de hacer un sobre esfuerzo en la actividad, ya que hay que recuperar terreno perdido, y ese plus siempre te da más posibilidades de éxito.
La capacidad de escucha, la reflexión, la empatía y la acción son vitales, especialmente en esta nueva etapa. Sea cual sea tu posición en la compañía, debes ser parte de la motivación de los colaboradores y parte de la solución de dar continuidad al negocio y garantizar la viabilidad financiera de la empresa.
¿Cómo estás viviendo personalmente este momento de confinamiento?
Lo vivo con doble intensidad.
Con intensidad a nivel profesional, ya que la carga de trabajo ha sido y es muy relevante. Liderando a mis equipos, intensificando los canales de comunicación, haciendo crecer el negocio y continuando con la innovación y el acompañamiento a nuestros clientes en un entorno muy complejo y sin precedentes.
A la vez con intensidad personal, con muchas emociones variables cada día. A ratos con preocupación y tristeza por lo que estaba sucediendo y en otros momentos con alegría de ver cómo íbamos adaptándonos y avanzando frente a la adversidad.
Como casi todo el mundo, he tenido que organizar una nueva rutina, forma de trabajo y agenda. En mi caso reconozco que también he tenido un tiempo de reflexión, a nivel profesional y personal, así como de leer e intercambiar conocimiento con otras personas de diferentes partes del mundo. Todo ello ha sido muy enriquecedor.
También he reservado tiempo para estar con la familia, con los que estaban en casa conviviendo y con los que estaban fuera en online. Y he mantenido el contacto con amigos.
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En esta etapa de confinamiento y cambio de hábitos en el trabajo, muchas compañías se han dado cuenta de que necesitan formarse en digital para conseguir adaptar sus objetivos al presente y el futuro.
Con la formación In Company de The Valley ayudamos a empresas a llevar a cabo su transformación, potenciando el talento interno con planes de formación diseñados a medida. Con contenido actualizado e impartido por expertos del sector digital, profesionales en activo que garantizan que la formación recibida sea aplicable al día a día de la empresa.